Por Mariano Garcia de Palau
Nacido en Barcelona el 17 de febrero de 1956. Se licencia en Medicina y Cirugía en la Universidad de Barcelona en el año 1979. Durante 38 años trabaja como médico de urgencias en el ámbito de la medicina laboral. Su interés por el cannabis surge de manera casual, y desde hace unos 15 años se dedica a estudiar el uso terapéutico del cannabis.
Actualmente sigue asesorando en tratamientos con cannabinoides y realiza trabajo clínico con pacientes, colabora con diferentes entidades y asociaciones, ejerce como Consultor Senior para el Grupo Curativa Colombia y es vocal del Observatorio Español Cannabis Medicinal.
Los cigarrillos electrónicos y el uso de e-liquids con o sin nicotina, están pensados para ayudar a los fumadores a dejar el hábito tabáquico. Partiendo de esta premisa, una inhalación debería producir una cantidad de vapor parecida a una calada de cigarrillo. Otros usos como generar enormes nubes, o realizar competiciones de destreza con el vapor, se alejan mucho de la finalidad del interesante dispositivo, pero el mamífero humano encuentra siempre cómo justificar usos discutibles de casi todo lo que pasa por sus manos.
Hay estudios que nos indican que la reducción de riesgos que se consigue con el uso del cigarrillo electrónico, respecto al consumo de tabaco, puede llegar a ser de un 95%, lo cual es una cifra realmente interesante, siempre que el uso sea correcto, y esto incluye la calidad del dispositivo electrónico, la composición y calidad de los e-liquids, y un consumo moderado y razonable. Este ultimo consejo creo que es aplicable a todas las sustancias que consumimos y a las actividades que realizamos.
Todos los e-liquids que hay en el mercado están compuestos básicamente por Propilenglicol, o PG, y Glicerina vegetal, o GV, en diferentes proporciones o porcentajes, y saborizantes. Pueden también contener agua destilada en pequeño porcentaje. Y no deben contener otro tipo de aditivos, lo cual es un importante dato como veremos más adelante.
Hay e-liquids en el mercado con CBD y terpenos, en diferentes porcentajes de CBD y perfiles terpénicos. En este caso los terpenos se podrían catalogar como saborizantes. La legislación vigente en Europa prohíbe la comercialización de productos con CBD como complemento alimentario, pero su uso en e-liquid, no sería alimentario.
El propilenglicol (PG), debería ser el componente básico utilizado en los e-liquids; es un compuesto alcohol orgánico incoloro, insípido e inodoro. La toxicidad oral aguda de una sola dosis de PG es muy baja. La toxicidad oral crónica también. Debido a esta baja toxicidad oral, el PG es generalmente reconocido como seguro desde hace muchos años, e incluso se le han atribuido propiedades bactericidas.
En cuanto a sus aplicaciones son muy amplias: como humectante en productos farmacéuticos, cosmética, alimentos y tabaco, como saborizante y solvente de coloración en comidas (quesos, helados, leches, etc.) y bebidas (aditivo alimentario E1520), como anticongelante de alimentos, en máquinas de humo artificial para entrenamiento de bomberos y producciones teatrales, como ingrediente en cosméticos, productos para bebés, en muchos medicamentos, desinfectantes de manos, lociones antibacterianas y soluciones salinas.
Hasta ahora, en los países de la Unión Europea su uso en alimentos para consumo humano está regulado por la Directiva del Parlamento y Consejo Europeo N° 95/2/EC para aditivos alimentarios que no sean colorantes o edulcorantes. Su carcinogénesis ha sido también estudiada siendo el resultando negativo.
Todos estos estudios hacen referencia al uso de PG por vía oral o tópica, pero no hay muchos estudios sobre su administración o uso por vía inhalada a medio y largo plazo. Pero hay que tener en cuenta que se usan cigarrillos electrónicos desde hace 16 años, y nunca se ha detectado epidemiológicamente ninguna patología que se pueda relacionar con un uso correcto y razonable de estos dispositivos.
La glicerina vegetal, o glicerol (GV) es un líquido transparente, inodoro, elaborado de los aceites de las plantas, especialmente aceite de palma, soja o aceite de coco. La GV tiene una serie de aplicaciones valiosas que incluyen los productos cosméticos, los alimentos y como sustituto del alcohol en las tinturas botánicas y herbáceas.
La glicerina vegetal utilizada en la elaboración de alimentos está avalada por la Farmacopea de los EE. UU. (USP), debe tener una pureza mayor a 99% y tiene un sabor dulce. La glicerina vegetal se metaboliza diferente al azúcar y es utilizada en los alimentos bajos en carbohidratos para aportar sabor dulce y humedad. A diferencia del azúcar, la glicerina no genera problemas odontológicos.
La GV puede ser utilizada como un diluyente y como sustituto del alcohol para preparar extractos o tinturas de hierbas. Esto es una ventaja para las personas que desean evitar la exposición al alcohol.
La glicerina vegetal, por sus características lipídicas, puede generar problemas respiratorios cuando se consume en exceso, siempre tenemos que comprobar el porcentaje de GV que contienen los e-liquids, cuanto más alto, más posibilidades de generar problemas si lo consumimos en exceso. Los problemas de salud derivados del uso de cigarrillos electrónicos están relacionados directamente con el porcentaje de GV, a mayor porcentaje, más posibilidades de tener problemas respiratorios.
Antes de entrar en este tema, nos vamos a remontar al año 2014. El primer caso de neumonía lipoidea diagnosticado en España (el segundo en el mundo) se diagnosticó en A Coruña en 2014. El paciente, un "fumador importante", consumía unas dos cajetillas diarias de tabaco. Pero al 'pasarse' al cigarrillo electrónico llegó a consumir cinco cargas diarias, el equivalente a cinco cajetillas. Su adicción se intensificó de tal manera que este consumo de e-liquids con porcentaje alto de glicerina vegetal, llegó a poner en riesgo su vida, y tuvo que ser ingresado en Hospital hasta su recuperación. Tras recibir el alta, el hombre ha vuelto al tabaco tradicional, aunque intenta moderar su consumo. Lo que generó el problema fue la acumulación de glicerina vegetal, un lípido que se fue acumulando en los pulmones del paciente, impidiendo una correcta oxigenación. "Si se mantiene el consumo de cigarrillos electrónicos, en poco tiempo se podrán diagnosticar más casos de neumonía lipoidea", aseguró Carlos Jiménez, director de investigación en tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica. Y va más allá: "Es una enfermedad que puede ser grave e incluso mortal si afecta a una persona con una insuficiencia previa"(3). Evidentemente, este consumo es excesivo, y seguro que los e-liquids contenían un porcentaje de GV del 50% como mínimo, lo cual facilita la aparición de problemas, siempre en relación con el abuso y el porcentaje de GV. Hasta la fecha no se ha vuelto a detectar otra neumonía lipoidea a pesar de la obsoleta regulación de los productos y del mal uso del cigarrillo electrónico que hacen muchos usuarios.
¿Que está pasando en USA actualmente? Aparece una "epidemia en vapeadores" que presentan problemas respiratorios graves, en relación con la inhalación de e-liquids que contienen THC. ¡Esta fue la noticia inicial!
El primer análisis médico se orienta hacia la neumonía lipoidea, pero pronto se descarta:
"Si bien no podemos descartar el papel potencial de los lípidos, no hemos visto nada que sugiera que este es un problema causado por la acumulación de lípidos en los pulmones. En cambio, parece ser algún tipo de lesión química directa, similar a lo que uno podría ver con exposiciones a humos químicos tóxicos, gases venenosos y agentes tóxicos", dice Brandon Larsen, MD, Ph.D., patólogo quirúrgico en Mayo Clinic Arizona y experto nacional en patología pulmonar (1).
El problema de salud generado en USA, y que han relacionado directamente con el uso de cigarrillo electrónico y THC, merece un análisis exhaustivo, ya que la explicación es sencilla, pero desgraciadamente a fecha de escribir este artículo han fallecido 39 personas y más de dos mil tienen secuelas o están gravemente enfermas. Si estamos usando e-liquids contaminados, o formulados erróneamente con productos tóxicos, vamos a tener problemas. Si los componentes de un cigarrillo eletrónico, como el tanque para el e-liquid, están contaminados por alguna bacteria u hongo, o es manipulado y llenado sin las condiciones higiénicas necesarias, tenemos un problema. Muchos usuarios de cigarrillos electrónicos se elaboran sus propios e-liquids, o lo que es peor, los comercializan en un mercado sin regulación ni control, y por lo tanto, las condiciones higiénicas y la calidad de los productos que se usen, van a determinar si el producto final es apto para el consumo, o puede generar problemas. Si hemos usado un producto derivado del cannabis para elaborar un e-liquid, si la hierba o el extracto están contaminados, con pesticidas o metales pesados, por ejemplo, el producto final va a generar problemas a corto o medio plazo, y ya no depende ni siquiera del uso del cigarrillo electrónico. Si los componentes del e-liquid no son correctos o las concentraciones son erróneas, podemos, como es evidente, generar muertes incluso.
El acetato de tocoferol (vit E) que tiene propiedades antioxidantes, y se usa en la industria alimentaria o farmacéutica, ha sido una de las causas de este desastre, ya que la empresa Honey Cut (2), ha estado comercializando un diluyente alternativo al PG y GV, con una composición explosiva, ¡un 90 a 95% acetato de vitamina E puro!, y el resto otras formas de vitamina E. Honey Cut ha conseguido, además, cotas de mercado muy altas en diluyentes de e-liquids, por lo que este hecho ha agravado el número de afectados. Si seguimos la cadena de producción, este diluyente de Honey Cut, ya muy problemático, llega por ejemplo a los hermanos Huffhines(5), de Winsconsin, ya imputados, que realizan una mezcla del diluyente con extracto de cannabis contaminado con myclobutanyl, hexano, butano, propano, etc. Tampoco las condiciones higiénicas son las correctas, ni el conocimiento para realizar estas formulaciones. Solo en el estado de California, hay unas 2800 tiendas que expenden estos productos sin ningún control; lo cual deja la situación en manos del gobierno, que debe afrontar el problema y regular este mercado para evitar problemas de salud graves, que se generan por la falta de regulación y control de los productos.
Pero la intención inicial ha sido clara, aprovechar la situación para arremeter contra el cigarrillo electrónico y el cannabis, sin ningún dato objetivo, y con desconcierto científico, acompañado de falta de conocimiento sobre este tema por parte de los agentes sociales que han gestionado la crisis. También tenemos que valorar los productos que llegan del mercado chino, sin los controles ni la información necesaria sobre los productos y su composición. Creo que es un problema global regular este mercado, ya que podemos evitar problemas de salud y aprovechar un recurso muy útil para los fumadores que quieren dejar el hábito tóxico del tabaco, que tantas implicaciones negativas tiene en nuestra salud. Si valoramos la información reciente, ha quedado claro que los estados que han regulado el mercado del cannabis han podido controlar mejor la situación pudiendo ejercer un control más eficaz para retirar los productos ilegales. La mayoría de casos han ocurrido en estados sin regulación. Queda claro que el mercado negro y la falta de regulación son la base del problema en USA. Hay que decir en su favor, que en el estado de California (5), en el último año y medio se han retirado productos y lotes de cannabis con licencia (unos 5000), por etiquetado incorrecto, presencia de pesticidas, solventes residuales, o metales pesados. El acceso legal a estos productos hace que su control sea eficaz, o no exista. Evidentemente queda claro que el problema que ha costado muchas vidas humanas, no tiene que ver con el cigarrillo electrónico, ni con el hábito de vapear, la causa es la falta de regulación y control de este mercado. Espero que esta situación no influya en la actitud legisladora de otros países, como sucedió con el cannabis a mediados del siglo pasado, y culminó con la firma en la convención de la ONU en Ginebra en 1961, en la que el cannabis pasó a ser un estupefaciente en lista 1.
Con una vaporización responsable y un control de la calidad de los e-liquids, además del uso de vaporizadores adecuados, podemos reducir los posibles riesgos del consumo de e-liquids, y si comparamos los riesgos del vapeo con el consumo de tabaco, podemos reducir considerablemente los problemas de salud derivados de su uso. De hecho, la vaporización es una alternativa para abandonar el consumo de tabaco, y si lo sustituye, los beneficios para la salud son más que notables. La calidad de los saborizantes, CBD o terpenos, que podamos encontrar en los diferentes e-liquids, es fundamental para evitar problemas derivados de toxicidad o contaminación incluso. Muchos vapeadores usan e-liquids de los que no conocen la composición, y realmente deberían ser los gobiernos los que regulen y no prohíban, aunque sea mas fácil para sus capacidades, estas alternativas al tabaquismo que tanto preocupan a algunas farmacéuticas como Pfizer, con su producto Champix (Vareniclina), que es el único producto en España que financia el sistema de salud pública, para deshabituar del tabaco. Según el diario Der Spiegel (4), esta compañía farmacéutica ha estado financiando campañas contra el cigarrillo electrónico en Europa, y si es cierta esta noticia, es porque les preocupa perder mercado con su producto farmacéutico, dada la eficacia del cigarrillo electrónico para dejar el hábito tabáquico. Evidentemente, el uso del cigarrillo electrónico no nos asegura el éxito en la deshabituación del tabaco, la principal herramienta es la fuerza de voluntad y la motivación para dejar el hábito.
Consejos técnicos para el uso de cigarrillos electrónicos
Proponemos un uso contracorriente, ya que actualmente el uso del cigarrillo electrónico fomenta la vaporización sub-ohm, con resistencias muy bajas de 0,15/0,30 ohm, y potencias superiores a los 200W en algunos dispositivos, lo que se traduce en la incandescencia casi inmediata de la resistencia, que genera unas temperaturas de hasta 400º. Añadiendo una proporción alta de GV en el e-liquid (40 a 80%), se consigue una cantidad extraordinaria de vapor. Pero no conseguimos el mejor sabor, su uso está enfocado a la producción de vapor en grandes cantidades, no a conseguir unos sabores complejos con muchos matices.
¿Es este un uso lógico del cigarrillo electrónico? Creemos que no.
Las sesiones de vapeo deben ser productivas, pero no tenemos que esperar nubes de vapor exuberantes, optamos por una cantidad de vapor razonable, que pueda imitar una calada de cigarrillo. Esto lo conseguiremos con e-liquids con porcentajes bajos de GV, como máximo el 20% sería aconsejable, pero ¡no los encontramos actualmente en el mercado con esta formulación! El problema es la GV, el PG es más seguro, aunque probablemente no inocuo. Consumo razonable y uso correcto.
El nivel gustativo se puede incrementar si usamos resistencias de 1 a 2 ohmios en nuestros atomizadores, tanto sean reparables, como "all in one", lo cual se traduce en un incremento más lento de temperatura, sin llegar a la incandescencia de la resistencia, y por consiguiente a altas temperaturas (300º a 400º). Estas temperaturas pueden generar compuestos como acroleínas o formaldehidos, y no son necesarias para vehiculizar los e-liquids. Minimizamos, pues, que se generen sustancias cancerígenas de manera eficiente, si comparamos con los derivados de la combustión de un cigarrillo. También aconsejamos vaporizar entre 15w a 30w, en vaporizadores con control de vatios. Los dispositivos "pods" de vapeo que encontramos en el mercado ya siguen estas directrices, se ha instalado la cordura y la lógica en estos dispositivos, por fin, ¡si comparamos con el uso de "mods" y atomizadores con resistencias de 0,15 ohmios y hasta 200 watios de potencia! Incandescencia rápida de la resistencia y altas temperaturas que pueden generar sustancias cancerígenas, siempre en relación con la calidad de los componentes del dispositivo y evidentemente del e-liquid.
No olvides el mantenimiento y limpieza periódica del tanque, por ejemplo, con alcohol isopropílico y agua tibia, y además, renovar las resistencias en función de la frecuencia de uso. Si cambiamos de e-liquid sin limpiar el tanque y cambiar la resistencia, los sabores se mezclarán inicialmente. Para los sibaritas,, tener varios atomizadores permite catar los diferentes e-liquids sin mezclar sabores. Hay que tener en cuenta que no se debe apurar el e-liquid del atomizador, porque se puede quemar el algodón y el sabor a quemado es inevitable, tenemos que cambiar la resistencia, o repararla si usamos atomizadores reparables.
Los cigarrillos electrónicos no están pensados para iniciarse en el vapeo como primer paso al posterior consumo de tabaco, nada más lejos de su indicación. Creemos que son interesantes para fumadores de tabaco que quieren tener un apoyo en la sustitución del cigarrillo por el hábito de vapear, que reduce de manera muy considerable los riesgos que comporta la inhalación de humo tras la combustión del cigarrillo.
Seguiré defendiendo el uso del cigarrillo electrónico, siempre adoptando las medidas de prevención de riesgos que aconsejamos y su filosofía de consumo.
Bilbiografía consultada
Análisis, diseño e implementación de una guía de iniciación al vapeo - Autora: AINHOA SALGADO VALDÉS Leganés, octubre de 2015 Proyecto fin de carrera ingeniería técnica en informática de gestión.
Cigarrillos electrónicos: toxicidad, adictividad y potencial utilidad terapéutica - F. Javier Ayesta Ayesta director del Máster en Tabaquismo Universidad de Cantabria Mª Jesús García-Blanco presidenta de la Sociedad Española de Especialistas en Tabaquismo (SEDET) Francisco Rodríguez-Lozano Presidente del Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo (CNPT).
Evidence review of e-cigarettes and heated tobacco products 2018 A report commissioned by Public Health England - Authors: Ann McNeill 1,2, Leonie S Brose1,2, Robert Calder1 , Linda Bauld 2,3,4, Debbie Robson 1,2. / 1 King's College London 2 UK Centre for Tobacco & Alcohol Studies 3 University of Stirling 4 Cancer Research UK.
House of Commons Science and Technology Committee E-cigarettes Seventh Report of Session 2017–19 Report, together with formal minutes relating to the report Ordered by the House of Commons to be printed 16 July 2018 - Science and Technology Committee The Science and Technology Committee is appointed by the House of Commons to examine the expenditure, administration and policy of the Government Office for Science and associated public bodies. Current membership Norman Lamb MP (Liberal Democrat, North Norfolk) (Chair) Vicky Ford MP (Conservative, Chelmsford) Bill Grant MP (Conservative, Ayr, Carrick and Cumnock) Darren Jones MP (Labour, Bristol North West) Liz Kendall MP (Labour, Leicester West) Stephen Metcalfe MP (Conservative, South Basildon and East Thurrock) Carol Monaghan MP (Scottish National Party, Glasgow North West) Damien Moore MP (Conservative, Southport) Neil O'Brien MP (Conservative, Harborough) Graham Stringer MP (Labour, Blackley and Broughton) Martin Whitfield MP (Labour, East Lothian) Publication Committee reports are published on the Committee's website at www.parliament.uk/science and in print by Order of the House. Evidence relating to this report is published on the relevant inquiry page of the Committee's website.
Vaping saves lives. It'd be madness to ban it David Nutt
Cigarettes kill. Anything that makes some smokers give them up is to be encouraged - Fri 14 Oct 2016 13.03 BST.
1) Vaping-associated lung injury may be caused by toxic chemical fumes, study finds October 2, 2019 Mayo Clinic.
2) From 'Veronica Mars' to toxic vapes: The rise and fall of Honey Cut By Marissa Wenzke, with David Downs November 8, 2019 Leafly
3) Diagnostican el primer caso de neumonía por 'vapear' El mundo 2014.
4) La farmacéutica Pfizer, acusada de financiar campañas contra el cigarrillo electrónico. El economista.es - Javier Romera 28/08/2019.
5) Leafly
Image: "Vaping" by Lindsay Fox is licensed under CC BY 2.0